Nuestra primera parada fue a pocos metros de iniciada la ruta, un CHOZO PASTORIL, antigua construcción de granito y retamas que servía de refugio para los pastores.
Seguimos andando y realizamos la segunda parada, el MIRADOR DE NORTE, desde donde podemos visitar el Valle de Lozoya y los Montes Carpetanos. El día era helador y nos encontramos algo de nieve de la noche anterior, pero el paisaje, como veis era precioso.
Despues de esta caminata y del frío que teníamos decidimos reponer energías en el merendero del Albergue del Hornillo.
Pronto reiniciamos la marcha y entramos en la ladera umbría donde nos espera gran variedad de vegetación que se conserva desde la última glaciación o vegetación relicta y que podemos ver en pocos enclaves de la Comunidad de Madrid.
Aquí esta la vegetación relicta, un precioso abedular creciendo a la orilla de un pequeño arroyo, llamado ARROYO DE LA CASITA
En este punto de la ruta unos 1300m propio del piso robledal en la Sierra de Guadarrama, también lo podemos observar en nuetra senda. Aquí vemos la hoja del Roble melojo y su porte con el cambio de color de sus hojas.
Nos encontramos un sotobosque con numerosos arbustos, como los brezos que crecen en zonas má
húmedas, el rosal silvestre, en esta época con sus frutos, el espino albar y las retamas.
Descendiendo la ladera llegamos a la CHORRERA DE MOJONAVALLE, en estos momentos con poco agua pero que en primavera con el deshielo de las nieves puede apreciarse en todo su esplendor.
A lo largo del camino nos hemos encontrado con formaciones geológicas típicas de la sierra, bolos de granito y tors.
Seguimos descendiendo por el pinar......
Y nos vamos encontrando otros árboles singulares, como el TEJO, todavía con frutos.
y el ACEBOalgunos con frutos, como el de la foto y otros sin frutos, ya que es un árbol dioico y sólo las plantas hembras los tienen.
Todo el suelo, rocas y troncos se aprecia una vegetación típica de zonas húmedas, como los HELECHOS, MUSGOS y líquenes. ya sabéis, son plantas que no tiene flores y se reproducen por esporas.
Al final del descenso volvemos a encontrarnos con el ARROYO DEL SESTIL, en todo su esplendor de otoño.
Recordad que este ecosistema es el idóneo para encontrar todo tipo de setas, algunas comestibles y sabrosas como este boletus.
HASTA LA PRÓXIMA, CHICOS!!! Merche Canal.